lunes, 2 de abril de 2012

Seminario Militante: Anarquismo y Revolución Ponencia Sesión No 4: Daniel Guerin y la actualidad de la revolución / Primer Bloque temático: Reflexiones teóricas. / Martes 27 de Marzo de 2012. / Por Karina

"[…] me atreví a sondear las riquezas del pensamiento libertario, pensamiento siempre vivo y actual si previamente se lo despoja de algunos infantilismos, utopías y romanticismos tan antiguos como faltos de utilidad” Daniel Guerin

Daniel Guerin, (19 de mayo de 1904 - 14 de abril de 1988) fue un militante de la CGT, un activista sindical y perteneció al frente Homosexual para la Acción Revolucionaria, participo en la Segunda Guerra Mundial, de la cual fue recluido en uno de los campos de concentración alemana, afortunadamente logra escapar. Durante la Guerra Civil Española actúa en la CNT (Confederación Nacional de Trabajo) Se evidencia en su actuar revolucionario el Amor Libre, tuvo serios problemas por su ideología anarquista-marxista, y eso lo llevó a que lo rechazaran los anarquistas por marxista y los marxistas por anarquista.

Adopta el Marxismo Libertario algo que en alguna medida es una síntesis entre marxismo y anarquismo, apartados específicos con los cuales el concordaba, y por los cuales no concebía esa dualidad entre marxistas y anarquistas, ya que él en la práctica podía fusionarlos, y al comunicarlo lograba reflejar el significado en un nivel más amplio de lo que era su pensar revolucionario.

El hecho de que fuera Bisexual había generado en él una práctica más profunda, de no aceptar las dinámicas represivas del estado. En este sentido es importante manifestar lo que se entendía o entiende por Homosexualidad y Revolución, el primer término, por demás un expresión discriminatoria de la sociedad burguesa, de la iglesia, por guardar los ordenes establecidos en la familia (entendida como una institución más de jerarquía y de opresión) indica la atracción de una persona, por otra del mismo sexo. [Esta atracción para él no era solamente por el mismo sexo sino por el otro, de ahí que sea bisexual. Desligado de la sexualidad, lo relacionamos, con lo que en párrafos anteriores  manifestábamos del marxismo libertario, sentía atracción por el pensamiento marxista y a la vez por el anarquista, por eso es que se hace necesario ver a este francés, en la práctica de su revolucionaria vida, esa es la relación dialéctica que logramos establecer]

Del segundo término, acordamos que está absurdamente gastado y mal interpretado,  desprovisto de su sentido histórico, ese sentido de lucha de un pueblo oprimido y explotado por sus opresores, de la voluntad de auto-empoderamiento y de desagenación  que corre por las venas de la persona o las personas que alguna vez o tradicionalmente han vivido esa explotación. (Expresamos –gastado y mal interpretado- cuando los opresores hablan de revolución, ejemplo, revolución fascista, ejemplo que da el mismo Daniel.)

Es así como este activista sindical logra ser un referente para la actualidad revolucionaria, pues integra los procesos de su vida por su sentir amplio del amor libre, del amor por sus ideas, del apoyo mutuo, (ese sentido de no llevar una doble moral), se constituye como un revolucionario de 24 horas de 7 días a la semana, en cada momento de su vida, aclarando por supuesto, que no se necesita ser bisexual, homosexual… para ser revolucionario, pero que tal vez las personas con identidades sexuales diferentes (incluidas las heterosexuales) si deberían ser revolucionarias expresas completamente, de por si el elegir esa característica tan propia, ya las hace estar en contra de ciertas dinámicas sociales, y las ubica en un lugar de enunciación diferente, en un lugar de búsqueda de procesos o incluso políticas que en futuro le permitan practicar libremente ese sentir, que no sea clandestina su expresión por el hecho del morbo o los juicio de las personas ajenas a dichos procesos, que logren construir procesos para la creación e interiorización de conocimientos necesarios, para enfrentarse con argumentos, en alguna eventualidad.

Un punto que no puede quedar desligado y mucho menos sin nombrar es la auto gestión esa necesidad porque el oprimido reconozca que la unión hace la fuerza, que necesita de ciertas herramientas conceptuales para lograr algo de igualdad, para no estar tan enterrado en la pirámide de jerarquías. 

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